Viví en una calle reticulada,
imperceptible y torcida.
imperceptible y torcida.
Allí soñé, amé, pinté,
descubrí y también enloquecí.
descubrí y también enloquecí.
Allí escribí, inventé, robé,
perseguí, gané y perdí,
perseguí, gané y perdí,
y ante todo…aprendí,
aprendí a convivir con uno mismo.
Aquellas paredes se quedaron con una parte de mí.
¿Villanueva de la Cañada, hermano?
ResponderEliminarRecuerdos, buenos o malos pero recuerdos. Si algo te he enseñado como costalero de la vida son dos órdenes de capataz: "Izquierdazo" y "Siempre de frente".
Un abrazo.
Claro q sí! izquierdazo!!! Villanueva de la Cañada siempre estará en mi memoria!! y muy orgulloso de lo que viví!!
ResponderEliminarGracias por leer mis poemas hermano!!